En la trilogía de Maggie Stiefvater, compuesta por Temblor y sus secuelas Rastro y Siempre, podemos encontrar elementos de moda en la literatura: los licántropos. Pero a pesar de ser otra historia sobre hombres lobos es original en varios sentidos ya que asocia el hecho de ser lobo a cuestiones más científicas como los factores que provocan estas transformaciones en los humanos mordidos. Y además, es acompañada por una historia romántica entre dos adolescentes no muy normales.
La autora, Maggie Stiefvater, tiene 31 años y ya logró la publicación de 13 libros. Algunas de sus historias pertenecen a sagas, otras a trilogías y otras son independientes. Su primer libro publicado fue “Lament” en el año 2008 y su secuela “Ballad” en 2009. Posteriormente publicó “Temblor”, “Rastro” y “Siempre”, en 2009, 2010 y 2011, siendo publicados en Argentina por SM en los respectivos años.
La autora, Maggie Stiefvater, tiene 31 años y ya logró la publicación de 13 libros. Algunas de sus historias pertenecen a sagas, otras a trilogías y otras son independientes. Su primer libro publicado fue “Lament” en el año 2008 y su secuela “Ballad” en 2009. Posteriormente publicó “Temblor”, “Rastro” y “Siempre”, en 2009, 2010 y 2011, siendo publicados en Argentina por SM en los respectivos años.
Sam K. Roth, nuestro héroe gótico romántico, fue mordido por un lobo a los ocho años y ahora, aproximadamente diez años más tarde, atraviesa lo que podría ser su último año como humano arriesgando su vida humana junto a Grace Brisbane, una adolescente amante de los lobos quien cursa su último año escolar. Ella es una chica rubia, inteligente e independiente, ya que debido al descuido de sus padres debió aprender a cuidarse sola y convivir con ella misma. Él es un chico de cabello oscuro y ojos amarillos, transmite tanto ternura como tristeza con la mirada. Parece sufrir no sólo por su pasado familiar traumatizante que pasó, sino también por su relación con Grace, ya que hasta un temblor puede obligarlo a cambiar a su forma lobuna para nunca más volver.
A lo largo de los tres libros Sam se ve afectado por distintos problemas, ya sean del pasado o del futuro, y como un típico adolescente encuentra apoyo en la música. Su música. Cada vez que recuerda algo del pasado que lo atormenta, recurre a las melodías que se encuentran en su cabeza, las que hacen que sus manos toquen solas los acordes de alguna canción mientras piensa en estos problemas.
A lo largo de los tres libros Sam se ve afectado por distintos problemas, ya sean del pasado o del futuro, y como un típico adolescente encuentra apoyo en la música. Su música. Cada vez que recuerda algo del pasado que lo atormenta, recurre a las melodías que se encuentran en su cabeza, las que hacen que sus manos toquen solas los acordes de alguna canción mientras piensa en estos problemas.
“Despiértame,
despiértame, dijiste
pero yo dormía también,
también soñaba
y ahora me despierto,
todavía me despierto
y veo el sol”
Esta es una de las melodías cantadas por Sam en momentos de sorpresa para sí mismo, ya que hacía algo que no creía posible. Y como todo héroe romántico, él presenta rasgos de ser un marginado social, de vivir en la melancolía y de dejar que sus sentimientos dominen su razón. Con la canción logra que sus sentimientos se liberen. Y podemos interpretar que gracias a ella puede enfrentar sus problemas y se siente aliviado e iluminado.
Para concluir yo opino que esta trilogía no es la típica historia de hombres lobos enamorados de chicas normales. Esta historia presenta muchas características que lo identifican con algo original y sin dudas la principal es Sam el personaje protagonista. 
