miércoles, 19 de octubre de 2011

Cuento policial

En la última casa de la cuadra vive una familia de tres integrantes, o más bien vivían tres integrantes hasta que encontraron al hijo muerto. Los padres habían salido y al volver él estaba bañado en sangre y no tenia pulso. La puerta no estaba forzada y solo tenia huellas del chico, la ventana estaba cerrada pero había una huella en el marco. El cuchillo había sido usado para cortar la carne de la cena antes de estar clavado en él.
Los detectives no encontraron ninguna pista de quien pudo haber sido el asesino.Él era un chico bueno, no tenia novia, pero si amigas, muchos amigos, pero solo uno muy cercano, él iba a la iglesia todos los domingos y así murió, con un rosario de plata en la mano.-"No es de él"- aseguraron los padres -¿Alguna idea de dónde pudo sacar el rosario?- pregunto el detective a los padres.-Sí, pero no creo que sea posible- dijo la madre. - ¿Que cosa?- pregunto ansioso el detective. -La última vez que vi ese rosario, estaba colgado en el cuello de su amiga.- contestó. -¿Que es lo raro en eso? Pudo ser un regalo de novia a novio. -Imposible- repuso la madre- Ella tiene novio... y se llama Martín.
Rápidamente los detectives se dirigieron a la casa de la "amiga".
-¿ Reconoces este rosario?- pregunto el detective.
- Sí, ¿cómo lo tiene usted?- dijo la amiga
- Lo tenia tu querido amigo muerto en la mano cuando lo encontramos.- diciendo querido con vos sarcástica.
-¿Y cómo llegó hasta él?, mi rosario se lo dí a mi novio para su cumpleaños.
El detective puso cara de sorpresa mientras le pregunta-¿Cómo se llama tu novio?
-Martín...- dijo la chica preocupada.
El detective tomó nota de la dirección del chico y prácticamente corrió hasta el departamento donde la madre abrió la puerta.
Al verlo simplemente lo supo, y le dijo:
-¿Ella te engañó con él verdad?- En tono medio bajo y sintiendo lástima por él.
-Sí, así fue. Y ella lo va a pagar, criando a su hijo sola.